Es de suma importancia en cualquier técnica de pintura, y
veremos que muy especialmente en la acuarela, entender las bases de la teoría
del color.
Pero si observamos un poco mas detenidamente nos daremos cuenta de que esa misma cereza no tiene el mismo color estando en el campo a plena luz del sol que estando dentro de una habitación, y que el mar estando en una tarde nublada no es igual a cuando esta el cielo despejado. De esta misma forma veremos que ante una total oscuridad no existe ni un solo color.
De esto se concluye que los colores no son propiedades de los objetos sino de la luz, y que esta es la suma de todos los colores.
Esto fue comprobado por Isaac Newton al hacer pasar por un prisma un rayo de luz blanca, esta se descomponía en todos los colores del espectro visible. A continuación colocó un segundo prisma, en posición invertida al anterior, y obtuvo nuevamente luz blanca.
Bueno, ya sabemos que los colores vienen contenidos en el rayo de luz, entonces el color que vemos en cada objeto es producto de la composición molecular de este, y según esta composición el objeto absorbe ciertos colores de la luz y deja libres a otros, que son los que finalmente captamos con nuestro ojo.
Casi un siglo después de Newton, el científico ingles Thomas Young descubrió que este espectro de colores visibles se puede reducir a tres, los que llamamos colores primarios, ellos son el azul, el verde y el rojo. De ellos se pueden obtener todos los colores visibles al superponer uno con otro. Esto es muy importante: esta superposición de logra agregando colores, o sea sumándolos, es por eso que reciben el nombre de colores primarios luz o colores aditivos.
Al mezclar estos tres colores, como ya sabemos, obtenemos luz blanca, pero al sumar uno con otro obtenemos otros tres llamados colores secundarios que son el magenta, el amarillo y el azul cian.
Pues bien, son estos los colores que nos interesa en la pintura, ya que estos tres colores secundarios "luz", son los primarios cuando mezclamos materia pigmentada en vez de luz.
